II Carrera de montaña que se ha celebrado en Castielfabib la comarca del Rincón de Ademuz, perteneciente a la Comunidad Valenciana, con una distancia de 100km y un desnivel d+3700mts y 139 corredores para afrontar un nuevo reto.
El municipio de Castielfabib está a 168 Kms. de mi casa en Rocafort y el planteamiento fue desplazarme el día de antes a Tuéjar para aclimatarme y dormir en casa de mis tíos, para aprovechar 1 hora más de sueño, porque el madrugón era importante y quería descansar lo máximo posible antes de empezar la carrera el día siguiente. en ese momento llegaba el autobús que nos llevará hasta Ademuz la línea de salida de la carrera y varios corredores hacían cola para subir, la ultra
nos esperaba. Buen ambiente y armonía nos rodeaba al bajar del autobús cargado con esas mochilas sobrecargadas.
El municipio de Castielfabib está a 168 Kms. de mi casa en Rocafort y el planteamiento fue desplazarme el día de antes a Tuéjar para aclimatarme y dormir en casa de mis tíos, para aprovechar 1 hora más de sueño, porque el madrugón era importante y quería descansar lo máximo posible antes de empezar la carrera el día siguiente. en ese momento llegaba el autobús que nos llevará hasta Ademuz la línea de salida de la carrera y varios corredores hacían cola para subir, la ultra
nos esperaba. Buen ambiente y armonía nos rodeaba al bajar del autobús cargado con esas mochilas sobrecargadas.
A las 3:30 horas del sábado suena el despertador para levantarme de la cama y con los nervios en el estómago intenté desayunar un plato de arroz a la cubana a secas con atún, que a esas horas de madrugada no es fácil de digerir, tenía media hora de margen para salir de Tuéjar y llegar a tiempo a Castielfabib.
Después de cargar la mochila, bastones, manta térmica, frontal, etc… todo listo rumbo a Castielfabib, en mitad del trayecto una niebla que te cagas, encendí todas las luces del coche incluidas las antiniebla, me falto encender la luz del frontal de la carrera, porque no veía ni una mierda solo a los conejos que cruzaban la carretera.
Sobre las 5:30 horas llegué al destino puntual donde
A puntito de dar el pistoletazo de salida me encuentro a nuestros amigos de A les Nou de Godella , Luis Hoyas y Toni Córdoba, unos fenómenos de la montaña.
A las 6:00h..de la mañana los 139 corredores chillando….. Au Au Au, fogonazos de frontales y luces rojas traseras nos dan el pistoletazo de salida y comenzamos este Ultra de 100km....(que la han llamado la corta) que de corta no tiene nada , ya te lo digo yo que la he acabado.
Empecé corriendo con nuestros amigos del C.A. A les Nou de Godella, haciendo grupo y con los frontales encendidos para iluminarnos mejor, que les mantuve el ritmo hasta antes del avituallamiento aproximadamente el km.13. Durante el trayecto Luis Hoyas que es un experto en las largas distancias de montaña, me aconsejó que el ritmo que llevaba era demasiado rápido y que aflojara porque todavía quedaban 90km, así que hice caso y aminoré la marcha, era de noche y bordeábamos el río con banda sonora de cantos de pájaros, corrientes de agua chocando contra las piedras y se escuchaba el crujir de las hojas secas de las pisadas de una gran fila de corredores, para llegar a Vallanca un pueblo muy bonito y el primer avituallamiento junto a una casa típica a ras del río en Negrón.
Bebí cocacola y me comí unas chocolatinas, rellené la mochila de agua y a continuar, eran las 7:30 horas de la mañana , estaba amaneciendo con los primeros rayos del sol y nos encarrilamos para subir al Talayón a 1601m. de altura, era hora para quitarse el frontal y ponerse la segunda capa térmica y la gorra, las subidas eran empedregadas y con muchos pinos, el aire fresco silbaba y al ir sudado pasé frío, toqué cima , era el primer control de paso y para abajo hasta enganchar al km 30 , donde estaba el segundo avituallamiento, mano de santo, para rellenar la mochila de galletas saladas y de chocolate, y continuar subiendo hasta los 1400 m. con bajada técnica al canto y todo lo que se bajaba se volvía a subir, otros 100 m. para arriba y otros 100 m. para abajo, hasta el km.40 del avituallamiento en Arroyo Cerezo, que casi paso de largo porque no lo vi, Quique Moret estaba haciéndome la foto de la carrera y todos chillándome que había que entrar a la casa que tenían preparado un buen plato de arroz a la cubana.
En este avituallamiento recargué agua en la mochila y cara arriba para subir trotando hasta La Cruz de los Tres Reinos a 1358m., con bonitas vistas de cuevas y un buen corte de roca que toda la montaña parecía una pared como un muro, para bajar cara al avituallamiento del km 53, una buena bajada bordeando el río y por sombras de chopos gigantescos donde despedimos el avituallamiento y me uno a una pareja de máquinas de Atletisme Puzol...Gustavo y Toni, que con ellos seria yo Finisher, donde llegamos al km. 60 y empieza un sube-baja-sube sube-baja baja campo a través piedras puntiagudas que no te dejan dar ni una pisada bien, así que empezamos a caminar a la marcha legionaria, con unos cortados inmensos que tendríamos que cruzar de parte a parte para llegar a la caseta de información y turismo en el km70, donde estaba el siguiente avituallamiento y recogían la bolsa que la organización te guardaba por si en la carrera ese material te hacía falta y no cargar con él que bastante peso teníamos encima con la mochila. Comimos porque íbamos desmallados y desquiciados por el recorrido que la organización había escogido y visualizamos alternativas mejores que se podrían haber hecho para que la ruta fuera más cómoda.
Después de comer y con el estómago lleno atacamos una mini pared vertical de 200 m. para luego volver a bajarla hasta llegar al km.75 y empezar a subir una mega pared de senda y medio pista forestal de aproximadamente 300 m. y al final el avituallamiento del km. 80 donde nos esperaba una pareja amable y un perro muy nervioso que casi me ataca, rellenamos la mochila y encendemos los frontales para volver a la acción, porque en la oscuridad de la noche el ruido de los búhos y de los pájaros escondidos entre las ramas me sobresaltaba, hasta aparecieron huellas recientes de pisadas de jabatos que nos acechaban.
Indignados de no haber tocado pistas durante el recorrido, de repente pistaca al cantoooo, ya era horaaa, pero nos duró poco hasta una bajada agresiva y resbaladiza donde sendeamos amunt y abaix hasta tocar el avituallamiento del Tormón en el km. 86 , y llegando una bonita imagen de la luna llena , las nubes arropándola y el pueblo junto río, una pasadaaa, donde recargamos la mochila de comida y bebida y a jalar bocadillitos buenísimosss que nos habían preparado la organización.
Continuamos bordeando el Río Ebrón, cruzándolo muchisisisimasssssssss veces y un cruce que se me ha quedado grabado en la retina, pedazo de cascada junto al río que había que cruzar donde el nivel de agua había subido, con dos opciones, te descalzabas y cruzabas descalzo o reconstruías el paso con piedras, y elegí la segunda opción la mía, ……él de Rocafort jajjajjajaja.
No me mojé las zapatillas allí y en una mierda de charco junto el río todo embarrado me chopé la puntera del pie izquierdo, menos mal que fue casi en el km. 90, había bordear el río y cruzarlo mil veces subiendo y bajando, rodear el pedazo de barranco que en medio pasaba el río, con precipicios peligrosos, a oscuras porque era de noche pero la luz de la luna y nuestros frontales nos alumbraban, pasamos por puentes de madera y escaleras esquivando el Río Ebrón para llegar a una zona que parecía que estábamos en una vía ferrata, pero cualquier despiste podías acabar en el agua, para llegar al Cuervo donde estaba el
avituallamiento del km. 95 . Continuamos indignados porque los puntos kilométricos no nos cuadraban ni en mi garmin que murió en el km. 91, ni él del compañero Toni de Atletisme Puzol, así que preguntamos a los voluntarios que nos quedaba de Kms., nos soltaron que solamente 4 Kms. , resumiendo ni un solo voluntario en toda la carrera sabía en que km de la carrera se encontraba, por lo que salimos con ganas de merendarnos esos últimos Kms. y empezamos a trotar por unas pistas forestales con un buen aroma de higueras y manzanos, para llegar a un pueblo que nos encontramos de cara y que creíamos que era la Meta,
y siguiendo las marcas de la organización nos desviamos al mismo pero pensábamos que no podía ser, que serían las marcas de los de la ultra de 170 km.
No me mojé las zapatillas allí y en una mierda de charco junto el río todo embarrado me chopé la puntera del pie izquierdo, menos mal que fue casi en el km. 90, había bordear el río y cruzarlo mil veces subiendo y bajando, rodear el pedazo de barranco que en medio pasaba el río, con precipicios peligrosos, a oscuras porque era de noche pero la luz de la luna y nuestros frontales nos alumbraban, pasamos por puentes de madera y escaleras esquivando el Río Ebrón para llegar a una zona que parecía que estábamos en una vía ferrata, pero cualquier despiste podías acabar en el agua, para llegar al Cuervo donde estaba el
avituallamiento del km. 95 . Continuamos indignados porque los puntos kilométricos no nos cuadraban ni en mi garmin que murió en el km. 91, ni él del compañero Toni de Atletisme Puzol, así que preguntamos a los voluntarios que nos quedaba de Kms., nos soltaron que solamente 4 Kms. , resumiendo ni un solo voluntario en toda la carrera sabía en que km de la carrera se encontraba, por lo que salimos con ganas de merendarnos esos últimos Kms. y empezamos a trotar por unas pistas forestales con un buen aroma de higueras y manzanos, para llegar a un pueblo que nos encontramos de cara y que creíamos que era la Meta,
y siguiendo las marcas de la organización nos desviamos al mismo pero pensábamos que no podía ser, que serían las marcas de los de la ultra de 170 km.
Al llegar al pueblo nos apareció un hombre en batín y dijo que aquí no era el final de la etapa, que había que bordear la montaña y nos encontraríamos Castielfabib donde estaba la Meta, nos tocó regresar sobre nuestras pisadas para hacer varios Kms. de más y la vuelta se hizo más larga que toda la carrera…… jajajajaja….. en fin con razón ese tramo se llama la cuesta del rato.
Y por fin después de la desesperación, visualizamos el pueblo de Castielfabib pero la carrera no había finalizado, la organización se lució con el recorrido y había colocado la Meta en lo más alto del pueblo donde había que subir para ser Finisherrrrrrr en el II Trail Ultra del Rincón de Ademuz.
Un reto más que me he planteado y he finalizado sin obsesionarme del tiempo, sin prisas, poco a poco y disfrutando del paisaje y de la naturaleza.
Sergio Valiente Forés del C.A.Rocafort Running
(UTR) 100 Kms y d+3700mts
Tiempo 19 horas 21minutos 21segundos
Muchas gracias por compartir tu experiencia Sergio. Estoy impresionada. Enhorabuena! Anne
ResponderEliminarJejeje, no te quejes xampión, la de geografía que has aprendido, seguro que en todos tus años de estudiante no imaginabas la de nombres de pueblos, ríos, montañas, etc del rincón de ademuz que ibas a patearte. MENUDA EXPERIENCIA, y a lo que parece tan fresco!, o no tanto?
ResponderEliminarya te digo ........Nombres de bonitos y maravillosos pueblos.......................................................
Eliminar.......................................que no seme olvidaran en la vida !!!